TRATAMIENTOS
Implantes y cirugía dental Pobla de Vallbona
Primero, establecer un diagnóstico adecuado basado en la exploración intraoral, radiografías, escaneado y fotos. Disponemos también de una herramienta muy útil como es el CBCT que nos permite obtener imágenes 3D.
A partir de ahí, establecemos un plan de tratamiento ordenado que supone recuperar la salud de las encías (periodoncia), arreglar las caries (obturaciones, reconstrucciones, endodoncias…), alinear los dientes (ortodoncia), … Y finalmente, restaurar mediante la colocación de prótesis, siempre con la misma filosofía: ser lo más conservadores posibles y mínimamente invasivos.

Podemos recuperar la salud y una buena función masticatoria.
El desgaste dentario es un proceso que provoca la pérdida de estructura dentaria. Vemos como los dientes se van acortando o adelgazando. La fricción de los dientes entre sí o la acción de los ácidos, así como el consumo de cítricos, zumos, refrescos, vino o ciertos medicamentos pueden provocar esa erosión o desgaste de los dientes.
Para llevar a cabo el tratamiento más adecuado, evaluamos las causas que provocan el desgaste. Una maloclusión, por ejemplo, puede estar implicada en la aparición de esos desgastes por lo que estaría indicado realizar un tratamiento de ortodoncia antes de la de restauración. Así, conseguimos repartir las fuerzas de oclusión proporcionalmente entre todos los dientes y posicionarlos correctamente entre sí, minimizando dichos desgastes.
Para reconstruir la estructura dental perdida podemos utilizar diferentes materiales y tipos de restauración siempre siendo mínimamente invasivos.
Cuando los desgastes son pequeños utilizamos composite colocado directamente en clínica o si son mayores, incrustaciones de composite que realiza el técnico de laboratorio. Una incrustación es una restauración de composite o también cerámica, que nos permite, conservando la mayor cantidad de estructura posible, devolver la anatomía original del diente. Para ello, se prepara el diente dando la protección y forma adecuadas a la cavidad y se escanea. A partir de ese escaneado, se diseña por ordenador la restauración que finalmente se confecciona mediante fresado en el material deseado.
Podemos confeccionar incrustaciones de cerámica para los dientes posteriores y carillas del mismo material en los dientes anteriores. También es posible confeccionar coronas completas utilizando Zirconio, un material muy resistente.
Para desgastes severos y generalizados que precisen de una rehabilitación completa, realizaremos un diseño digital previo ( encerado diagnóstico) y lo imprimimos para probarlo en boca (mock up) antes de fabricar las restauraciones. Esto nos permite obtener resultados más precisos y estéticos.
Somos especialistas en prótesis dental. Analizaremos tu caso y plantearemos diferentes alternativas de tratamiento.
La pérdida de dientes puede provocar diferentes tipos de alteraciones que serán mayores cuanto mayor sea el número de piezas perdidas ausentes y el tiempo que pase hasta su reposición.
Si faltan dientes y no se realiza correctamente la trituración del alimento, este pasa al estómago en condiciones que no son las idóneas para continuar con una digestión adecuada, lo que a largo plazo puede acabar produciendo alteraciones de tipo digestivo.
Si la falta de piezas dentarias se prolonga en el tiempo, los dientes junto a la ausencia y los de la arcada contraria tienden a desplazarse e inclinarse hacia el hueco, alterándose el plano de oclusión de la boca, lo que puede dificultar la confección de la futura restauración. Ese movimiento favorece también la aparición de caries y problemas en los tejidos de soporte alrededor de los dientes.
Cuando existe un correcto engranaje de los dientes, hay una buena posición de la articulación de la mandíbula. Pero cuando se pierden dientes, esa posición se altera, lo que hace que con los movimientos normales la ATM ( articulación temporomandibular ) sufra, produciéndose alteraciones que irán desde pequeños ruidos al abrir o cerrar la boca hasta importantes dolores o bloqueos con la boca cerrada o abierta, que requieren ser reducidos.
La ausencia de dientes puede afectar también a la fonación ya que los sonidos no se pronuncian correctamente.
Otra función importante de los dientes es la estética. Según la posición de los dientes, su color o su tamaño el aspecto de la cara puede variar. Además, los dientes mantienen la forma y la tonicidad muscular dando un soporte a los tejidos faciales y evitando la aparición de arrugas que dan un aspecto de envejecimiento prematuro a la cara.
Por tanto, es importante reponer los dientes perdidos y para ello, disponemos de dos tipos de prótesis:
Reponemos los dientes perdidos recuperando estética y funcionalidad mediante la colocación de implantes de alta calidad.
La ausencia de los dientes conduce a un deterioro de la situación dental global y puede tener un efecto considerable en la dieta, el habla, la risa, en tu salud y bienestar general. Para solucionarlo disponemos de diferentes alternativas de tratamiento como la colocación de implantes en el hueso maxilar o mandibular a modo de pilares sobre los que posteriormente confeccionar la prótesis.
Hoy en día los implantes se han convertido en una herramienta de trabajo habitual y segura que nos permite rehabilitar la ausencia de un solo diente o de toda la boca para que puedas de nuevo masticar con normalidad.
Tenemos diferentes formas de trabajar con implantes, por eso, es importante hacer planificaciones personalizadas, adaptando la técnica a cada situación. Disponemos de los medios y la tecnología como el CBCT para poder realizar un diagnóstico y tratamiento precisos.
En la clínica somos especialistas en:
En nuestra clínica utilizamos implantes de alta calidad. Eso significa que podemos proporcionar soluciones técnicas personalizadas para adaptarnos a tus exigencias con una excelente precisión, lo que nos permite conseguir muy buenos resultados clínicos a largo plazo.
Unas encías saludables son un reflejo de una boca saludable.
Las enfermedades que afectan al hueso y la encía que sujetan el diente como la gingivitis y la periodontitis son de las causas más comunes de pérdida de los dientes, y su control es fundamental. Antes de realizar cualquier tratamiento en la boca debemos asegurarnos de que estos tejidos son saludables ya que eso garantizará el éxito de nuestras restauraciones.
Uno de los inconvenientes de estas enfermedades tan frecuentes es que evolucionan sin que se perciban hasta que alcanzan estadios en los que, la pérdida de hueso es tal, que provoca movilidades de los dientes y, finalmente su pérdida.
Provocada por bacterias, es una enfermedad crónica que requiere de un tratamiento y posterior mantenimiento continuado para evitar que se acumule sarro alrededor de los dientes donde esas bacterias se acumulan. Para ello, realizaremos limpiezas con ultrasonidos, raspados más profundos o cirugía periodontal. Todo ello acompañado de una buena higiene en casa.
Existen factores de riesgo que aumentan el riesgo de sufrir periodontitis como el tabaquismo, la ingesta de algunos medicamentos de forma sistémica, malposiciones dentarias y algunos hábitos como el bruxismo.
Además, la periodontitis se relaciona con más de 50 enfermedades diferentes. La bacteria que provoca la periodontitis puede entrar en el torrente sanguíneo a través del tejido de las encías, y de esa manera posiblemente afectar otras partes del cuerpo. Por ejemplo, la periodontitis está relacionada con las enfermedades respiratorias, la artritis reumatoide, la enfermedad de las arterias coronarias, el nacimiento prematuro y el bajo peso al nacer, y los problemas de control de la glucosa en la sangre en la diabetes.
Conservar el diente es nuestro primer objetivo.
La endodoncia consiste en el tratamiento del tejido pulpar, lo que llamamos nervio, cuando se encuentra lesionado o infectado. Normalmente realizamos este tratamiento cuando hay una caries muy extendida o una fractura dental que ha provocado una inflamación o muerte de la pulpa dental. El tratamiento se realiza para mantener el diente sano y que sea útil para masticar, evitando tener que extraer la pieza dental.
Si este tratamiento no se realiza, puede suponer la pérdida del diente, la propagación de la infección a la sangre, celulitis facial o angina de Ludwig y ostemelitis.
La técnica consiste en extraer el nervio, desinfectar el conducto de la raíz y después sellarlo con un material termoplástico (gutapercha) y cemento u otro tipo de material de obturación. Después de la intervención, se procede a realizar una radiografía para verificar que todo ha ido correctamente.
Una vez tratado el diente, es muy importante su restauración mediante la colocación de incrustaciones o coronas.
Nuestro equipo de especialistas está esperando para ayudarte.
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